Contenido
- 1 ¿Qué es la atonía del proventrículo bovino?
- 2 Formas de la enfermedad
- 3 Causas de hipotensión proventricular en bovinos
- 4 Síntomas de la hipotensión de la cicatriz del ganado
- 5 El curso de la enfermedad
- 6 Diagnóstico de la atonía del proventrículo en vacas.
- 7 Tratamiento de la atonía del proventrículo bovino
- 8 Pronóstico
- 9 Medidas preventivas
- 10 Reseñas sobre el tratamiento de la atonía del proventrículo en una vaca.
- 11 Conclusión
El tratamiento de la atonía pancreática en una vaca avanza rápidamente y sin consecuencias, pero solo si la enfermedad se diagnosticó de manera oportuna. En las últimas etapas del desarrollo, la atonía del rumen en el ganado se acompaña de obstrucción intestinal, que puede provocar la muerte de los animales por agotamiento.
La enfermedad se clasifica como estacional: la incidencia máxima de atonía de cicatrices se produce en primavera y otoño. En riesgo son principalmente las vacas, seguidas de las cabras.
¿Qué es la atonía del proventrículo bovino?
La atonía del rumen en una vaca es una enfermedad del sistema digestivo, que se expresa en un debilitamiento del tono de los músculos del proventrículo. Esto lleva al hecho de que dejan de contraerse y provocan el estancamiento de los alimentos no digeridos. Si el tratamiento no se inicia a tiempo, la vaca morirá de hambre y eventualmente puede morir de inanición.
Formas de la enfermedad
Es costumbre distinguir 2 formas de atonía ruminal en las vacas, que se diferencian entre sí solo en los factores de ocurrencia:
- La forma primaria de atonía del proventrículo se desarrolla como resultado de la interrupción del sistema digestivo causada por errores graves en la organización de la alimentación de los animales, la falta de caminar en la temporada de invierno y el consumo insuficiente de agua.
- La forma secundaria de la enfermedad puede ocurrir si se desarrolla alguna patología en otros órganos no relacionados con la digestión. Por ejemplo, la atonía de la cicatriz es provocada por trastornos metabólicos, deficiencia de vitaminas, disfunción renal y hepática, así como infecciones graves.
Causas de hipotensión proventricular en bovinos
La atonía del proventrículo en una vaca puede ocurrir por varias razones, que incluyen:
- Alimentación irregular, cuando el ayuno se alterna con la alimentación intensiva de los animales.
- Alimentar al ganado con alimento pesado (paja) o heno de mala calidad (mohoso, podrido, húmedo). También incluye concentrados baratos.
- La inclusión de alimentos en mal estado en la dieta de las vacas: pienso, con una vida útil caducada, verduras enmohecidas, patatas germinadas o en descomposición.
- Cambios drásticos en la dieta de las vacas. La atonía del proventrículo en las vacas en la mayoría de los casos se desarrolla en septiembre-octubre, cuando el rebaño cambia de alimento fresco en pastos a alimento compuesto.
- Agua estancada sucia o falta de agua. Un factor adicional en el desarrollo de la cicatriz atonía es el suministro de agua fría a los animales. Se recomienda calentarlo al menos un poco.
- Uniformidad de alimentación. No puede alimentar a los animales solo con piensos combinados. Una dieta completa de las vacas incluye la alimentación con piensos suculentos.
- Infección por parásitos o ingestión de infecciones intestinales en el cuerpo del animal.
- Estancamiento del ganado. Si no pasea a las vacas en el invierno, la probabilidad de desarrollar atonía del rumen aumenta significativamente.
- Conducir ganado a largas distancias durante los meses de verano.
- Ruido industrial excesivo.
Síntomas de la hipotensión de la cicatriz del ganado
Los síntomas de la atonía pancreática en una vaca son los siguientes:
- cese total o parcial de la lactancia;
- el animal rechaza la comida;
- el comportamiento se vuelve letárgico, apático;
- calor;
- pérdida de peso rápida;
- la vaca comienza a ponerse rancia;
- los eructos se detienen;
- se forma un sello en la cicatriz;
- los músculos de la cicatriz no se contraen;
- las heces de los animales son demasiado densas;
- el animal deja de defecar;
- Diarrea;
- falta de chicle.
La cantidad normal de contracciones del rumen en una vaca antes de la ingesta de alimento es de 2-3 veces en 2 minutos. Después de comer, este indicador aumenta hasta 4-5 veces en 2 minutos. Con la atonía del proventrículo, la cicatriz se reduce solo 1 vez al inicio de la enfermedad, en las etapas posteriores la contracción desaparece por completo.
El curso de la enfermedad
El historial médico de la hipotensión ruminal en el ganado sugiere los siguientes cambios en el cuerpo del animal:
- La oxidación de los alimentos ingeridos en la cavidad del rumen provoca procesos patológicos en el sistema digestivo.
- Se viola la proporción de ácidos grasos.
- Se reduce el número de microorganismos en el rumen. Como resultado, se ralentiza la digestión de la fibra en los alimentos.
- En 2-3 horas después de la ingestión de alimento de mala calidad o producto en mal estado, los ciliados comienzan a dividirse.
- El segundo día, los ciliados comienzan a enquistarse.
- La alta concentración de toxinas en el estómago mata a estos microorganismos.
- Los productos tóxicos, cuando se absorben en el intestino, comienzan a deprimir el sistema nervioso del animal, lo que provoca la negativa a comer y el cese de la masticación.
- Se altera el intercambio intersticial.
- La reserva de alcalinidad de la sangre disminuye.
Diagnóstico de la atonía del proventrículo en vacas.
El historial médico de la mayoría de las vacas con atonía del rumen comienza cuando el animal se estanca y deja de eructar. Estos síntomas son una buena razón para llamar a su veterinario. Antes de hacer esto, puedes sentir el vientre de la vaca. En el caso de la atonía del proventrículo en animales, se siente claramente un engrosamiento de la cicatriz.
Al hacer un diagnóstico, siempre existe el riesgo de que la atonía se confunda con un trauma al animal. En particular, el médico debe descartar la presencia de reticulitis traumática en la vaca antes de emitir un veredicto final.
Además, la ausencia de contracciones del proventrículo puede deberse a daños en las paredes del esófago y el proventrículo mismo. Esto sucede si la vaca traga un objeto extraño afilado. Al igual que con la atonía del rumen, la comida deja de ser digerida.
Tratamiento de la atonía del proventrículo bovino
Ante los primeros signos de la enfermedad, se recomienda consultar a un especialista. Un examen por parte de un veterinario y una consulta posterior sobre el régimen de tratamiento adicional aumentan significativamente las posibilidades de recuperación del animal. Con una elección independiente de los métodos de tratamiento, es posible que se produzcan errores en la determinación de la dosis de los medicamentos y la violación de la dieta recomendada.
Un conjunto de medidas para combatir la cicatrización atonía tiene como objetivo resolver las siguientes tareas:
- normalización de la secreción del proventrículo;
- restauración de las funciones motoras de la musculatura de la cicatriz;
- detener la descomposición de los alimentos en el proventrículo;
- eliminación de procesos de intoxicación.
El plan general para el tratamiento de la atonía cicatricial es el siguiente:
- La cantidad de comida en el 1er día de tratamiento se reduce al mínimo o se detiene por completo la alimentación. Al mismo tiempo, se sigue dando agua a las vacas. Se recomienda agregarle sal de mesa a razón de 10 g por 10 litros de agua.
- El segundo día, los animales se alimentan con algunas verduras, verduras o heno de alta calidad.
- Al tercer día, comience a alimentar con el pienso combinado.
- Para una pronta recuperación, puede agregar al alimento el hablante medicinal, que está hecho de sal de Glauber. Se diluyen 150 g de la sustancia en 1 l de agua y 450-700 g de aceite vegetal.
- De vez en cuando, la zona de la cicatriz se masajea con el puño. Frecuencia de masaje: 4 veces al día durante 10-12 minutos.
- Cuando comienza la enfermedad se llevan a cabo las medidas fisioterapéuticas acordadas con el veterinario.
Además de ajustar la dieta de la vaca, también es necesario seleccionar medicamentos para el tratamiento de animales enfermos. Son recetados por el veterinario.
Muy a menudo, se recetan los siguientes medicamentos para la atonía de cicatrices:
- "Proserin". El tratamiento se combina con la introducción de una solución especial de levadura en la dieta del animal. Para ello, se mezclan 100 g de levadura con 200 g de azúcar y se diluyen en 1 litro de agua, seguido de la adición de alcohol etílico (no más de 45-50 ml). La solución se administra a las vacas 1 vez al día cada 2 días.
- En caso de intoxicación grave, a las vacas se les inyecta magnesio y glucosa.
- La fermentación en los órganos digestivos se detiene con una solución de "Ictiol" en una proporción de 15 ml por 1 litro de agua. Frecuencia de uso: 2 veces al día, todos los días. También puede utilizar "Protosubtilin".
- El equilibrio ácido se corrige con ácido láctico. Para esto, se diluyen 30-70 ml de la sustancia en 1 litro de agua. La mezcla se administra a las vacas enfermas cada 2 días.
Los métodos tradicionales de tratamiento incluyen el uso de soluciones e infusiones de hierbas medicinales. Estos incluyen las siguientes plantas:
- Chemeritsa normaliza la función intestinal. El animal enfermo se insiste y se riega durante 2-3 días.
- El ajenjo mejora el apetito. La infusión se administra a las vacas 2 veces al día por 15 g.
- Encurtido de pepino. La dosis diaria recomendada es de 300 a 400 ml.
Pronóstico
Las posibilidades de recuperación de la atonía gástrica en una vaca son bastante altas. El pronóstico para el éxito del tratamiento es especialmente favorable si la enfermedad se diagnosticó a tiempo; en las primeras etapas, el animal se recupera en cuestión de días.
Si la atonía del proventrículo ha causado complicaciones en forma de inflamación del abomaso y los intestinos, y el libro está lleno, el tratamiento se retrasa de 1 a 2 semanas. Si se detecta una enfermedad en etapas posteriores de desarrollo, es posible su transición a una forma crónica.
Medidas preventivas
Para evitar la aparición de atonía del proventrículo en una vaca, es necesario organizar correctamente la alimentación del animal. Además, es importante cumplir con las recomendaciones generales para el cuidado del ganado, por lo tanto, la prevención de la atonía del proventrículo incluye el siguiente conjunto de medidas:
- Las vacas deben beber agua limpia y fresca. En agua estancada, en la que han caído objetos extraños o partículas de alimentos, pronto se desarrollarán microorganismos dañinos. Cuando ingresan al cuerpo de una vaca, provocan el desarrollo de atonía del proventrículo.
- La selección de alimentos para la alimentación animal debe realizarse con cuidado. En ningún caso debe alimentar a su ganado con heno mohoso, paja, tubérculos podridos, patatas germinadas o verduras con moho. Por supuesto, proporcionar a las vacas alimentos de calidad es costoso, sin embargo, el costo del tratamiento después del desarrollo de la atonía será aún mayor.
- La transferencia de animales de un tipo de pienso a otro se realiza de forma paulatina. Los cambios bruscos en la dieta conducen no solo a la atonía, sino también a alteraciones generales en el trabajo del tracto gastrointestinal.
- El ganado se alimenta de forma estandarizada, teniendo en cuenta las dosis y frecuencias recomendadas, que se calculan en función de la edad de los animales. El ayuno, incluso por poco tiempo, es especialmente negativo para la salud de las vacas, seguido de una mayor alimentación, diseñada para compensar los días de hambre.
- El forraje se administra a los animales solo después de una cocción preliminar al vapor o mezclado con alimento suculento.
- Durante los meses de invierno, se recomienda dejar salir a las vacas a pasear al menos 1-2 veces por semana. Suficientes 2 horas de calentamiento para reducir el riesgo de desarrollar atonía.
Se puede encontrar información adicional sobre el tratamiento de la atonía de cicatrices en el video a continuación:
Reseñas sobre el tratamiento de la atonía del proventrículo en una vaca.
Conclusión
El tratamiento de la atonía pancreática en vacas en la mayoría de los casos tiene éxito. Lo más importante es diagnosticar la enfermedad a tiempo, ya que en las primeras etapas las posibilidades de recuperación son mucho mayores. Si el tratamiento se retrasa, la atonía del proventrículo de la vaca puede provocar la muerte del animal.